29 oct 2015

A golpe de Click: los problemas del periodismo actual

"Click." La llave mágica que nos permite el acceso a cualquier sitio de Internet. Tan fácil como pulsar un botón y a golpe de click encontramos todo lo que necesitamos.

Acostumbrados a esto, sobre todo aquí en España, no es de extrañar que nos llevemos las manos a la cabeza cuando en algunas páginas extranjeras, y cada vez más las nacionales también, nos restringen el acceso; cuando nos topamos con el peaje por adentrarnos en la carretera de la información. Esto es lo que pasa hoy en día con páginas como la de The New York Times: nos dejan avanzar unos "kilómetros", libres, y después nos encontramos con la barrera del pago.

En España, cuando las nuevas tecnologías despegaron fue al mismo tiempo que el famoso boom económico, lo que nos hizo vivir en una cultura despreocupada y de la gratuidad. Nos convertimos en el niño malcriado al que no se le dice que no a nada y que lo obtiene todo de forma inmediata. Dentro de esto, los medios de comunicación escritos son los que han salido perdiendo al ver que su trabajo puede llegar a ser prescindible por una sencilla razón: "¿ Por qué voy a pagar por un periódico cuando puedo leer las noticias gratis en Internet desde mi teléfono móvil?"

Pienso que este problema radica primariamente en la educación y la mentalidad que se tenga en cada sociedad. Por ejemplo, los británicos pagan por tener una televisión pública e imparcial porque les interesa que les informen con calidad. Y los americanos están acostumbrados a consumir cadenas y medios de pago desde siempre.

En mi opinión, la solución a este problema es crear una nueva concepción de prensa escrita digital como por ejemplo la que ha puesto en marcha la nueva revista de El Mundo, PAPEL o la revista 5 W. Esta última se formó gracias al crowdfunding, superando todos los récords de donación. Esto se debe a que ofrece información y reportajes especializados en temas tan de actualidad y conflicto como el Estado Islámico o el caso de los refugiados, además de otros temas "olvidados" por los medios tradicionales. Para poder realizar esto cuentan con profesionales, tanto periodistas como fotoperiodistas, por todo el mundo. Ofrecen también gráficos y líneas temporales que hacen comprender fácilmente temas complejos. El precio a pagar: tres euros de suscripción mensual on-line, una cantidad muy pequeña al alcance de todos.

Lo que quiero decir con este ejemplo es que hay que ofrecerle un complemento, un valor añadido al lector para que elija consumir tu información y no otra que pulule gratis por la red. Pura estrategia de marketing. Para los románticos del papel es triste y difícil de comprender, pero hay otras alternativas. De nada sirve ya informar a secas. Hace tiempo que el periodismo se convirtió en un negocio, y como toda empresa, lo que se busca es la rentabilidad y el máximo beneficio a toda costa. Así que para no perder la costumbre de pasar las páginas y las manchas de tinta en los dedos solo nos queda el típico refrán "renovarse o morir."





20 oct 2015

Fenómenos naturales

La chica del sombrero
contemplaba embelesada
al chico guapo,
del otro lado de la sala.
Y el guitarrista,
a la camarera despistada
de la barra.

Todos a oscuras
bebían,
sin control.
Follában,
sin consuelo.
Sin parpadear para ver
la luz 
del rayo verde.
Para capturarla, 
con un guiño.

Al entrar en contacto,
la sala y la oscuridad
se disuelven 
como roca caliza,
áspera y rugosa,
por miles de gotas
a cámara lenta.

Fallas que se resquebrajan,
saliendo despedidas
en direcciones
contrarias,
por la fricción de las pieles.




2 oct 2015

#Microcuento: Ojos que no ven, corazón que no siente

Te vi y cerré los ojos
por miedo a que me vieras.

Los abrí y ya no estabas.

Los habías cerrado tú también,
por miedo a que te viera.